sábado, 27 de febrero de 2010


Son las flores de las mimosas

retando al persistente invierno,

iluminando el paisaje gris,

presagiando la nueva primavera.

Duermen cansados los árboles secos.

Ni un brote anuncia su resurrección.

Es necesaria mucha fe para esperar el milagro

Ahí están ellas, las flores de las mimosas,

Iluminando el paisaje gris,

te darán su olor y color

si las abrazas en un ramo de dicha.

Cuando caigan marchitas y

a los pies del tronco se extiendan, rendidas,

tu y yo caminaremos por la senda prometida y

ya las aves harán sus nidos,

las cascadas caerán con fuerza y

todo el frío de las nieves desde lo alto,

morirá en sus estrepitosos brazos.